La diseñadora Lucía Ruiz Rivas es la creadora y directora de este original establecimiento situado en el número 13 de la calle Fernando VI. Lucía define este espacio como “una tienda que significa algo más que un lugar donde comprar. Es un lugar en el que poder vivir una experiencia, en el que pasear, tomar un café o simplemente observar e inspirarse”. La idea surgió tras vivir algunos años en Finlandia, donde son habituales este tipo de negocios, y tras dos años de trabajo la diseñadora logró por fin abrir las puertas de Do.
Con una superficie de 200 m², la tienda está dividida en cuatro zonas distintas: moda y accesorios, muebles y decoración, galería de arte, publicaciones y objetos de papelería, y por último, cafetería. En este espacio encontraremos una exclusiva selección de artículos relacionados con la moda, la estética y la funcionalidad, mezclando las últimas tendencias con lo más tradicional.
Se trata de un ambiente cálido donde predomina la madera y el estilo vintage, sobre todo gracias a los muebles diseñados por la propia Lucía. Allí encontraremos ropa de diseño, artículos decorativos para el hogar, porcelana y arte, entre otros muchos productos firmados por artistas internacionales como Henrik Vibskov, presentes en pocos comercios de Madrid.
En el establecimiento destacan techos altos, paredes de ladrillo, vigas a la vista y mesas de madera maciza, todo con un encantador estilo rústico. Pero lo que más llama la atención en Do es su gran mostrador en forma de casita, así como el probador, que recuerda a una caseta de playa, una puerta de espejos, un árbol que nace del suelo y revistas colgantes decorando las paredes.
Este concepto de espacio multiusos está muy presente en otros países, aunque en España Do es una de las tiendas pioneras. Hablamos de un espacio diferente, donde poder no sólo comprar, sino pasear, tomar un café y admirar los pequeños tesoros que alberga en su interior.
Fuente Imágenes por Do
El sitio es muy bonito, una cosa más que me da gana de visitar a Madrid.
Es cierto que un sitio fresco, simple y relajante es algo que le viene bien a la capital española.
Un saludo
Baptiste J.